Casi cuarenta mil fieles, quienes portando banderolas, pancartas, pañuelos y globos multicolores, con preferencia en blanco y amarillo (colores del Vaticano), dieron la bienvenida a la mamita de Cahpi que hoy volvió a la ciudad poara engrandecer aún más la fe de los arequipeños. El estadio de la Universidad Nacional de San Agustin se lleno desde tempranas horas, mujeres, niños y hombres pugnaron por ver de cerca a la virgen, para recibir una bendición. El representante del Papa Bendicito XVI, Giovani Batista presidió la misa de honor y felicitó la presencia y participación no sólo de los consagrados, sino y sobre todo de los laicos, de la Arquidiócesis, manifestando: “Lo que me ha impresionado más es la participación de los laicos en la vida de la Iglesia, y la intensidad de la generosidad con la que ayudan a la Iglesia y al Obispo”. Recibió de obsequio un retablo con la imagen de la Virgen de Chapi y otro para el Santo Padre, manifestó que esta grata impresión, será la que transmita a Benedicto XVI. “Dios bendiga a Arequipa. Que sea siempre fiel a su identidad católica y a los valores humanos y espirituales que caracterizan su gloriosa historia”, fue la exhortación final del reverendo en la culminación de la homilía de la Eucaristía de Clausura del Año Jubilar, por los 400 años de creación de la Diócesis de Arequipa.