El llanto de Lindsay Lohan tras escuchar el dictamen de la jueza que la sentenció a 90 días de prisión efectiva y luego a 90 días de rehabilitación, por no cumplir su impedimento de consumir alcohol o drogas, ya denotaba el miedo de la actriz. Los comentarios expresados por su madre no hacen más que confirmarlo. “Lindsay se muere de miedo. Tú sabes que ella es fuerte, pero cuando uno se enfrenta a algo tan devastador ya veremos”, comentó. “Ella es una luchadora, y no nos van a rendir hasta el resultado final. Es tiempo de conseguir otro abogado”, agregó. La actriz también deberá pasar un año sin ingerir alcohol. Luego de su sentencia, Lohan se refirió en su Twitter al artículo 5 de la Declaración Universal de los DD.HH.: “Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes”.
